Un cielo lleno de juguetes

Era pequeño pero un gran guerrero que había cabalgado mucho al lado de su pony de armadura brillante, a pesar de haber caminado durante mucho tiempo bajo el cielo, mantenía esa fuerza intacta en cada uno de sus pasos.

Nolan y su pony llegaron un día a un pequeño arroyo con árboles frondosos y ruidos de ruiseñores cantores, después de tomar un buen sorbo de agua y refrescarse, Nolan se hechó a dormir, su pony siempre cerca cuidaba de él, a veces los sobresaltos de noche lo ponían siempre en alerta listo para correr y poner a salvo a su jinete, su amigo.

Ese sueño de nuestro guerrerito fue de largo suspiro, de gran alegría, de gran cariño, antes de cerrar los ojos y estando recostado observaba las nubes de formas graciosas que se formaban en el cielo, caprichosas se movían hasta juntarse con otras, esos pompones de nieve estaban siempre vivas, es más, hasta hablaba con ellas. De tanto mirar Nolan quedó profundamente dormido y empezó su sueño maravilloso…

Su pony tenía una armadura de colores, y el cielo, no te imaginas, cada nube era de distinto color, rápidamente Nolan subió de un salto a su pony y empezaron a cabalgar.

De tanto correr, al pony le salieron unas alas y los dos empezaron a volar, alto y tan alto que llegaron a las nubes de colores, este cielo de colores estaba lleno de juguetes, todos los que se pueden imaginar, desde canicas chiquitas hasta castillos encantados enormes para descubrir y caminar. Todo lo que había era juego, uno nunca se podía aburrir y menos cansar.

El pony se posó en una nube amarilla con naranja para que el guerrerito pueda bajar, después de un gran saludo y un abrazo inmenso el pony hechó a volar para volver a tierra firme y dejar a Nolan jugando en ese cielo de juguetes hasta volver otra vez.

Aunque Nolan deseaba quedarse con su pony, entendió que él debía volver para continuar ayudando a otros guerreritos que seguían cruzando ese desierto árido y llevarlos hacia el arroyo donde puedan descansar y continuar con su viaje.

Nolan, en el cielo de juguetes, conoció nuevos amigos y empezaron a divertirse con todos los juguetes de colores que encontraban, de vez en cuando, Nolan paraba por un momento y miraba hacia la tierra como buscando a su pony en algún lugar, él estaba muy feliz y seguro de que algun día se volverían a encontrar.

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English versión

A sky full of toys

He was small, but a great warrior who had ridden much by the side of his pony in shining armor, despite of having walked for a long time, he kept that force intact in each of his steps.

Nolan and his pony arrived one day to a small stream with leafy trees and singing nightingales, after taking a good sip of water and refreshing themselves, Nolan went to sleep with his pony always near looked after him, sometimes the shocks of night put him always on alert ready to run and put his rider, his friend, safe.

That dream of our little warrior was a long sigh of joy, of great affection, before closing his eyes and being lying down he observed the clouds of graceful forms that formed in the sky, capricioulys they moved to join with others, those pompoms of snow were always alive, indeed, even talked to them. From so much watching Nolan was deeply asleep and began his wonderful dream…

His pony has an armor of colors, and the sky, you cannot imagine, every cloud was of different color, quickly Nolan jumped up to his pony and began to ride.

From so much running, the pony came wings and the two began to fly high very high, the sky was full of toys, all you can imagine, from little marbles to charmed castles to discover and walk around. All that there was is game, you could never get bored or sleep.

The pony settled in a yellow and orange cloud so the warrior can come down, after a big greeting and an immense hug the pony went to fly to return to land and leave Nolan playing in that sky of toys until returning again.

Although Nolan wanted to keep his pony, he understood that he must return to continue helping other warriors who were still crossing the arid desert and take them to the stream where they can rest and continue their journey.

Nolan, in the sky of toys, met new friends and started to have fun with all the colorful toys they found, from time to time, Nolan stop for a moment and look down at the earth as if looking for his pony somewhere, he was very happy and sure that someday they would meet again.

(Traducción: María Fernanda Chirinos Mendiguri)